Cómo proteger una mesa de madera
Las mesas de madera natural no sólo aportan calidez y elegancia a cualquier espacio, sino que también representan una opción de durabilidad, sostenibilidad y belleza atemporal. Cada pieza de madera es única por sus vetas, tonalidades y texturas, convirtiéndose en un elemento decorativo con personalidad.

Lo primero que hay que tener en cuenta es distinguir entre muebles de madera maciza, muebles chapados y muebles contrachapados. La madera maciza está compuesta en su totalidad por material natural procedente del tronco del árbol. Por otro lado, los muebles chapados se fabrican con una fina capa de madera adherida a una base de otro material (como MDF o aglomerado) y los muebles contrachapados se fabrican con finas chapas de madera encoladas entre sí.
Esto es importante ya que la durabilidad y el mantenimiento cambian. Los muebles de madera maciza son más resistentes y pueden restaurarse fácilmente con el paso del tiempo. Mientras que en los otros dos casos, cualquier roce o arañazo hará que esa fina capa de madera se rompa y deje a la vista lo que en la mayoría de los casos es DM. Nosotros siempre apostamos por los muebles de madera maciza.
En este artículo, presentamos una serie de consejos prácticos sobre cómo proteger una mesa de madera natural, garantizando su durabilidad y belleza. Todas las recomendaciones son para muebles de interior.
¿Por qué es importante cuidar la madera natural?
Cuidar y saber proteger la mesa de madera no es sólo una cuestión de estética, sino también de funcionalidad. He aquí algunas razones por las que es esencial cuidarla con esmero:
- Conservar su estética y color original: La madera natural puede perder su color o mancharse con facilidad si no se protege adecuadamente.
- Aumentar la durabilidad de la mesa: Un buen mantenimiento puede alargar considerablemente la vida del mueble.
- Prevenir los daños causados por la humedad, el calor o los arañazos: Estos factores son los principales enemigos de la madera mal cuidada.

Tratamientos protectores: qué opciones hay
Un mueble de madera puede durar toda la vida. Ante cualquier incidente, ya sea por un golpe, un arañazo o un derrame de líquidos, siempre tenemos la opción de dejarlo como nuevo.
Existen varios tipos de tratamientos que ayudan a proteger la madera. La elección dependerá de sus preferencias personales, del aspecto que desee para sus muebles y del nivel de protección que necesite.
Aceites naturales
El aceite de linaza, por ejemplo, nutre la madera desde el interior, realzando su veteado y dándole un acabado cálido y mate. Son ideales para quienes buscan un aspecto más natural. Recomendamos utilizar aceite incoloro para interiores para preservar su aspecto natural, pero puede utilizar aceite con tintes si lo prefiere.
Ceras
Proporcionan una capa protectora a la superficie y le dan un ligero brillo. Requieren aplicaciones periódicas pero son fáciles de mantener.
Barnices (opción recomendada)
El barniz es uno de los tratamientos más eficaces y duraderos. Forma una capa resistente al agua, a los productos de limpieza y a los rayos UV.
Es muy importante tener en cuenta que, además de los tratamientos mencionados anteriormente, existen técnicas específicas sobre cómo proteger una mesa de madera de los arañazos. Recuerde siempre seguir las instrucciones del fabricante de los productos que utilice y tomar las debidas precauciones de seguridad durante el proceso.
Consejo: Utilice el tratamiento que elija con las piezas por separado y monte el mueble una vez finalizado el proceso.

Consejos diarios para proteger su mesa de madera natural
Independientemente de si aplicas un tratamiento de barniz, cera o aceite, si deseas proteger una mesa de comedor de madera o de cualquier otro tipo, te recomendamos algunas prácticas sencillas que pueden marcar la diferencia:
- Utiliza posavasos, manteles y manteles individuales: Estos accesorios ayudan a evitar marcas de calor, humedad o manchas de comida y bebida.
- Limpieza adecuada: Se recomienda limpiar con un paño suave ligeramente humedecido con agua y, si es necesario, un jabón neutro. Evita productos agresivos como lejía, amoniaco o limpiadores multiusos que contengan alcohol.
- Secado inmediato de derrames: Si se derrama líquido, lo mejor es secarlo rápidamente con un paño absorbente, evitando frotar enérgicamente.
- Evita la exposición directa al sol: La luz solar directa puede decolorar la madera con el tiempo. Si es posible, coloca la mesa lejos de las ventanas o utilice cortinas o persianas para filtrar la luz.
- No arrastres objetos: Es importante no arrastrar objetos sobre la superficie para cuidar una mesa de madera.
Si quieres más consejos sobre cómo proteger la madera, consulta nuestra guía para el cuidado de muebles de madera maciza.

Mantenimiento periódico: importancia y cómo llevarlo a cabo
Más allá de los cuidados diarios, el mantenimiento periódico es esencial para conservar la madera en perfecto estado.
- Comprueba el estado del acabado: Cada cierto tiempo es recomendable comprobar si la superficie presenta signos de desgaste.
- Vuelve a aplicar el tratamiento si es necesario: En el caso de aceites o ceras, es aconsejable volver a aplicar según las indicaciones del producto. Con barniz, puede bastar con un repaso puntual o un lijado y barnizado completo si el desgaste es bastante notorio.
- Pulir la superficie: Para mantener el brillo y la suavidad, puedes pulir la mesa suavemente con un paño de microfibra después de limpiarla.
- Limpieza regular
Las mesas de madera natural son piezas que, con los cuidados adecuados, pueden acompañarnos durante muchos años. Aplicar los tratamientos adecuados, adoptar buenas prácticas diarias y realizar un mantenimiento regular son claves para preservar su belleza y funcionalidad.
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